domingo, 4 de diciembre de 2011

Números que asustan

Fuente: usuario Insider, foro TuRiver.


Hoy, River vivió el perfecto retrato de la cultura termo. Esos que negaban los malos, hoy se asustan con la derrota y no observan que River mereció ganar y lo perdió por errores puntuales de un par de individualidades. Lamentablemente, necesitaron verse empatados en el segundo puesto de la tabla para reaccionar un poquito. Escribí lo siguiente en turiver. Es, a mi entender, la basura que durante 17 fechas se escondió bajo la alfombra.

1. River ganó menos de la mitad de los partidos que disputó (17). Registra 8 victorias, 6 empates y 3 derrotas. Consiguió 30 puntos y ya dejó en el camino 21. En la tabla que toma a los puntos obtenidos como local, está noveno.

2. Se ubica segundo, en zona de ascenso directo, solamente por mejor diferencia de gol respecto a Rosario Central. Durante la primera rueda, no le pudo ganar a Instituto, que va primero, a Central, que va tercero, a Boca Unidos, que va cuarto, a Quilmes, que va quinto, a Ferro, que va sexto, a Atlético Tucumán, que va séptimo, ni a Defensa y Justicia, que comparte el octavo puesto con Almirante Brown (River lo enfrentará en la fecha 19).

3. Y más importante: no da garantías 2 partidos seguidos, a pesar de tener el mejor plantel de la categoría. 

Opté por resumir con datos, en lugar de reiterar un pensamiento que todos conocen. Considero fundamental que el presidente y el consejo de fútbol estudien seriamente la continuidad del DT después del partido frente a Patronato y entiendan la necesidad de no desprenderse de jugadores titulares y de contratar 2 refuerzos de calidad para no volver a subestimar la situación y agrandar el margen de error.

Agrego algo que me parece importante y tiene que ver con los refuerzos que llegaron. 

Alayes: ni concentra.
Vella: suplente.
Arano (el DT pidió su renovación cuando quedaba libre): suplente
Ledesma: suplente
Maestrico: suplente.
Aguirre: titular o suplente según el esquema
Sánchez: titular.

Un solo titular. Eso también habla de una pésima lectura de mercado.

Solamente el punto 2, amerita una gran autocrítica de parte del DT y de todos los que toman las decisiones futboleras en River.


RDLT

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